Un grupo de estudiantes y profesores se prepararon durante varios encuentros para servir durante la visita del Santo padre a Chile. Recibieron el encargo el día sábado anterior en el Parque O’Higgins con la bendición del Cardenal Ezzatti y los implementos necesarios para distinguirse en el servicio: gorro, peto y morral para llevar consigo. El día 15 de enero, tuvieron que iniciar su misión como pasacalle en la Alameda, cuando pasara en el papa móvil de camino a la Nunciatura. Después de ello se dirigieron hacia el parque O’Higgins, donde debían preparar la visita de los peregrinos que iban al parque. Pasaron la noche en el movi star arena, en la conversa, con un café, colación y preparando el lugar designado, ya que a eso de las 03.:00 comenzaba el ingreso de los peregrinos visitantes, para participar de la Eucaristía con el Papa a las 10:00 hrs. de la mañana. Asistieron a este lugar unas 400 mil personas, que con devoción y respeto se acomodaron, participaron y pudieron saludar el recorrido del papa, en su vehículo. Posteriormente, terminado la celebración, tuvieron que dejar limpio el lugar antes de retirarse a sus casas, con la satisfacción del deber cumplido y lel orgullo de haber representado a nuestro Liceo Ruiz Tagle. Con nuestras camisetas mostramos que servir es la tarea del Ruiz Taglino.
Roberto: “Nuestro corazón ardía a la vista de Emaus”. El Señor de la Vida nos depara alegrías y nos hace notar su presencia en medio de nosotros. Fue una jornada hermosa, con muchos rostros de diferentes lugares, pero un solo corazón en Jesús. Como los peregrinos de Emaus, fuimos bendecidos y enviados a vivir nuestra fe y compromiso con alegría y pasión según las enseñanzas de las Bienaventuranzas y que el Papa Francisco en su homilía explicó tan bien. Fue una experiencia comunitaria de vida y compromiso con nuestra fe. Jesús a través del Papa no invita a descubrir en su magnitud el amor infinito de Dios y a manifestarlo con alegría y compromiso a los demás.”
Luis: “Desde la invitación a participar de voluntario en la visita del papa, ya fue un estado particular, de servicio en una misión. La preparación y las acciones que nos toco vivir fueron momentos de encuentro como Iglesia, dando testimonio público de nuestra fe, creemos en Jesús, acogemos al Santo Padre como Vicario de Cristo y anunciamos con el canto, el juego y la alegría de que la Paz nos la dió el Señor. Hubo sacrificios, hubo cansancio, hubo risas, hubo sueño…pero todo por servicio que valió la pena, por que como dijo el Papa, “Bienaventurados los que ponen su esperanza en el Señor, porque vendrán tiempos nuevos”. Vivir este tiempo de gracia para Chile, junto a colegas y alumnos, sea para nosotros como Ruiz Taglinos, tiempo de Gracia en el 2018”
Rosita: Una experiencia inolvidable, el estar cerca del Papa, acompañar un grupo de alumnos y profesores, es crecer espiritualmente. Doy gracias por tener esta oportunidad. Uno contribuye pero es mucho más lo que se gana”