top of page

Visita de la Hna. Karolinne Mayer al Liceo Ruiz Tagle


En el contexto de ofrecerles a los Cuartos Medios generación 2016 un último encuentro de reflexión, hemos invitado a la Hna. Karoline para que nos dialogue y establezca una relación entre su Misión y los proyectos de nuestros alumnos. Ella, con todo su dinamismo de servicio evangelizador, les ha propuesto, desde su propia experiencia y realidad lo que significa servir y tener conciencia ante las dificultades de los más desvalidos y cómo es necesaria una sensibilidad social suficiente para que este país sea mejor.

Nació por allá en la ciudad alemana de Eichstätt. Luego de su bachillerato, y para prepararse a la vida religiosa, en 1964 ingresó como novicia a la Congregación Misionera de las Siervas del Espíritu Santo, haciendo sus votos en diciembre de 1967.

Desde que llegó a Chile el año 1968 se instaló en las poblaciones marginales. En esos años de profundos cambios en Latinoamérica y el mundo, la hermana Carolina, como le dicen todos, se volvió fiel seguidora de la Teología de la Liberación. Entre los años 1969 y 1973, desarrolla su labor misionera y se dedica a complementar su formación humana y profesional.

Su labor pastoral y social la realiza en la Población Áreas Verdes, de la comuna de Las Condes, Santiago, donde contribuyó a formar la Comunidad Cristiana, y a crear Jardines Infantiles y un Comedor Infantil. En marzo del 73 le ordenaron volver a su país, pero ella había prometido a la gente de la población que no los iba abandonar. Pero su vocación religiosa siguió intacta y el cardenal Silva Henríquez la acogió en la Iglesia chilena. Eran los tiempos duros de la dictadura, fue detenida, participó del Comité Pro Paz y de la Vicaría de la Solidaridad. Esa Iglesia marcó su labor pastoral.

Con el regreso de la democracia creó la Fundación Cristo Vive en La Pincoya, que en distintos ámbitos beneficia hoy a más de 28 mil personas. Alza también su voz crítica frente al modelo económico, también desde dentro y siendo parte de ella, critica a la Iglesia chilena, llama a los chilenos a tener más conciencia por todo lo que ocurre en la sociedad, invita y suscita en medio de los jóvenes, esperanzas de aportar a la participación y a la construcción de un modelo de país más humanizador, mas inclusivo, porque, asegura. "…Nos duele reconocer que tantos chilenos vivan sumergidos en la pobreza y la exclusión social; nos une el anhelo de un mundo más justo y fraterno...", y es por eso que su voz sigue siendo un fuerte llamado a la conciencia de todo cristiano y toda persona de buena voluntad, inspirada y motivada por el Corazón de Jesús…

Felipe Ruiz, después de escuchar este testimonio dijo: “ Me pareció interesante conocer un poco sobre la historia de la Hermana y su misión acá en Chile, ya que ella no tenía en su mira venir al país… su misión ha sido ardua en la ayuda a mucha gente de escasos recursos, gente con discapacidad, adictos, ya que su fundación acoge a todos para que puedan vivir mejor, aportando a mejorar nuestra sociedad”.

bottom of page